viernes, 18 de junio de 2021

"Amalgama de hojas secas" de Rafa Núñez ya forma parte de las estanterías de la Biblioteca Central de Terrassa (Barcelona).





Hoy nos llega al Club una noticia, que nos parece interesante de compartir con todos nuestros seguidores, amigos de este blog y de nuestras redes sociales.

Hace unas semanas un descendiente de paisanos, afincado en Terrassa, Carlos Bonilla, movido por la curiosidad de que en La Viñuela, tierra de sus familiares directos, había nacido un poeta se dirigió a la biblioteca de su localidad para solicitar el libro de Rafa Núñez "Amalgama de hojas secas", y no ha parado hasta conseguir verlo en sus estanterías, así que desde hoy forma parte de la Biblioteca Central de Terrassa (Barcelona).

Esta Antología poética puede ser leída en la Biblioteca de La Viñuela, Biblioteca "Santa María de la Cabeza" en la localidad de Periana, y desde hoy en la Biblioteca Central de Terrasa.

Pequeños pasos que configuran, poco a poco, el perfil de un autor que ha nacido en el Club de Lectura y Teatro en la localidad de La Viñuela.

Seguiremos apoyando la cultura en todas sus vertientes y sumando tus pequeños éxitos que son también los nuestros.


martes, 15 de junio de 2021

IX. DEJA QUE TE CUENTE



Saludos, queridos lectores. Os traemos un nuevo ejercicio en el que los miembros del Club de Lectura y Teatro de La Viñuela hemos elaborado microrrelatos, de unas 150 palabras aproximadamente, en los que debemos incluir unos términos clave propuestos entre todos. El tema de las historias es libre, aunque en ocasiones se ve muy condicionado por alguna de los términos obligados. Eso sí, originalidad y ocurrencia no va a faltar. En este caso serán 10 las palabras propuestas. Aclaramos que sustantivos y adjetivos pueden utilizarse en masculino o femenino, singular o plural; los verbos pueden utilizarse en cualquier tiempo o persona, o incluso en sus formas no personales; no se puede sustantivar un adjetivo, la palabra debe cumplir la función que originalmente se ha propuesto. Animaos en casa a practicar los ejercicios, podéis sorprenderos gratamente.

Sin más, aquí tenéis las palabras propuestas para este ejercicio: RELENTE, APACIGUAR, BRILLO, DELEZNABLE, SUADIR, PERPETUAR, QUERUBÍN, ANOCHECER, LIBERTAD y CABRA.

¿Misión imposible? Para nada. Deseamos que disfrutéis de la lectura.

Dori Calderón Ramos
ESCALADA
Tu primera mirada no me pareció amenazante, sin embargo, enseguida me percaté del brillo de tus ojos y supe de tu deleznable propósito.
Icé mi espada con osadía tratando de apaciguar tus intenciones, pero mis palabras parece ser que te sonaron a música de querubín y, lejos de suadir tu empeño, solo consiguieron alentar tu tesón.
Una voz me aconsejó no perpetuar la situación, ya que el relente podía complicar la vuelta a casa, miré mi mano alzada y mi soñada espada resultó ser un paraguas que portaba por posibles lluvias, y ante las carcajadas de mi familia entregué las galletas a la cabra recuperando mi libertad.
El anochecer nos sorprendió terminando el descenso del Cares, dónde esta especie caprina cada vez se toma más libertades con los visitantes.

Mercedes Rodríguez Silvente
LIBERACIÓN
Hoy me siento una mujer libre y con gran autoestima. Aunque a veces recuerdo mis tiempos de juventud.
Tenía veintitrés cuando mi deleznable marido me dejaba a cargo de más de doscientas cabras. Así cada día hasta el anochecer. Un chico solía ayudarme e intentaba suadirme de que era muy joven para llevar una vida tan triste. Su prestancia y el brillo que desprendían sus ojos, me enamoró. Por mi parte deseaba perpetuar aquella relación, era como un querubín para mí. Quedamos un día a las afueras del pueblo, era de noche, el relente caía sobre nuestros cuerpos. Mi cómplice me notó desanimada y trató de apaciguar la desazón, me besó, y sentí una libertad que mi marido no me proporcionaba.
Así pasamos unos meses hasta que decidí proponerle el divorcio a mi esposo, él no lo asimiló, sin embargo, mi decisión era firme. Aquel joven me abrió los ojos y me liberó, hoy somos grandes amigos.


Rafa Núñez Rodríguez
SUSURROS
Un nuevo anochecer que le daba libertad a las estrellas, quizás para perpetuar mis pasos, para alumbrar mis actos, sobre aquellos caminos que yo convertía en deleznables.
El relente de la luna me acaricia el rostro, mientras me envuelvo en la piel de cabra, pobre animal, fue mi última amiga, y así se lo pagué, con una nueva muesca en mi cuchillo.
Escondido, oteo el horizonte. En el silencio, querubines me susurran canciones para apaciguar mi sed, pero también llegan voces de pequeños demonios que me lamen las orejas, y entonces, me brillan los ojos.
Ya se escuchan los primeros pasos confiados, me froto las manos mientras pienso que les tendré que suadir de que la muerte no es tan mala.


Mª Jesús Campos Escalona
BIBERONES Y RISAS
Jamás podíamos pensar que nuestro cariño por ti haría perpetuar tu deleznable mal genio. No fuimos capaces de ver ese brillo maligno en tus ojos.
Estábamos todos juntos, el relente del anochecer había cambiado. Tú, como en cada toma, aparecías hambrienta y te bebías el biberón como si de un hermoso querubín se tratara. Mi hermano no dejaba de acariciarte queriendo apaciguar tu nerviosismo y tú, malhumorada, lo embestiste con tal rabia que a penas pudimos suadir tal arrebato. Mi hermano apareció debajo de la cortinilla azul que tenía mi madre en la cocina.
Todos reímos con la libertad y la inocencia que te da la niñez.
Nos quedó muy claro, nunca te metas con una cabra.


Laura Pérez Alférez
LA HISTORIA DEL ANCIANO
Alrededor del brasero, los querubines, cobijados del relente, escuchaban cada anochecer la historia que les contaba el anciano, tenía que ser recordada como sucedió, de ello dependía el futuro y la supervivencia del clan.
Pero, como nadie es eterno, el anciano murió y otro ocupó su lugar. El nuevo cuentista se dedicó a pintar en pergaminos de piel de cabra, para perpetuar el cuento. Quien quisiera saber solo tenía que acercarse a los manuscritos.
La memoria empezó a fallar, las hojas hablaban por sí mismas contando cuentos diferentes, según quien los leyera. Cada cual tenía su versión, pretendiendo suadir a los demás de su verdad.
Se tildó de sospechoso y se coartó la libertad a todo aquel que lo entendía diferente, era necesario apaciguar suspicacias deleznables.
Ya nadie recordaba la historia que durante tantos años había sido contada al calor del brillo del brasero.
La historia del anciano ya se había perdido y olvidado.


Benet da Silva
CON UNA SONRISA
Al llegar el anochecer, Javier observaba como caía el relente y el brillo que desprendían las gotas al recibir la luz del foco exterior, en momentos desviaba su mirada hacia la valla que cercaba el corral de las cabras, –«aborrezco a esos sucios animales y su deleznable olor», pensó—. Además, de robarle su libertad, le apartaron de Gabriel, a pesar de intentar suadirlo, de que no se bebiera la leche cruda. De nuevo se centró en la caída del rocío con el fin de apaciguar su nerviosismo, había decidido no perpetuar su soledad y hoy volvería a contemplar el rostro de su amado querubín y su tierna mirada.
Se encaminó a la mesa, engulló los somníferos y se tumbó en la cama, y en su último sueño, pudo preguntarle:
―¿Me recuerdas?
Un beso de Gabriel fue la respuesta.​
La mañana siguiente encontraron su cuerpo sin vida, sus labios, parecían sonreír.

Cande Molina Mostazo
MÁS LOCA QUE UNA CABRA
Comenzaba a anochecer, el cielo estrellado tenía un brillo extraño, el húmedo relente se calaba en el cuerpo, pero no me quedaba más remedio que seguir caminando. De vez cuando miraba hacia atrás, tenía la sensación de que alguien seguía mis pasos, notaba como cada vez mi respiración estaba más agitada, intentaba apaciguar mi ira. "Es una jefa deleznable, con que libertad decide nuestros horarios, tenía que haberle suadido y no haber consentido trabajar una hora extra, por ello he perdido el autobús y ahora me veo en este apuro", me decía para mis adentros.
Los pasos se escuchan cada vez más cerca, veo una sombra y mi miedo se hace pánico, acelero el paso y busco un lugar donde esconderme. De pronto, pego un respingo y grito de dolor, mi trasero ha sido atacado por una cabra, ese era mi perseguidor, encima tiene cara de querubín. Frunzo el ceño y sonrío mientras hago perpetuo este momento en mi memoria.

Mª Carmen Jiménez Aragón
LA FOGOSA AFICIÓN
Aquel relente no me suadiría de conseguir mi propósito. Estaba convencida de no querer perpetuar, por más tiempo, mi estancia en ese deleznable lugar. Así que al anochecer, con el brillo de las primeras estrellas, recogí lo poco que me pertenecía y eché un último vistazo al cuerpo inerte de aquel desgraciado. Ya empezaba a descomponerse y el olor me produjo una súbita arcada. Apaciguando mis nervios, me dirigí a la entrada, donde un sonriente querubín sostenía un cuenco lleno de llaves y llaveros, y busqué la que me devolvería mi ansiada libertad.
Una vez fuera, como la cabra siempre tira al monte, le prendí fuego a la casa y me alejé tratando de esconderme. Debía buscar un nuevo escenario donde poder disfrutar de mi fogosa adicción sin que ningún vigilante social intentase reprimirme.


Gema Frías Luque
LA CABRA TIRA AL MONTE.
Noté en el brillo de sus ojos que algo estaba a punto de suceder, pero sabía que, durante el anochecer, el relente sería deleznable. Al llegar la mañana vi que el animal podría apaciguar su comportamiento y yo sería capaz suadir y aplacar sus ánimos para pasar otro día tranquilo, pero al llegar la tarde la cabra comenzó a berrear y tras sentir varias contracciones, en mitad de la libertad que ofrece la naturaleza, tuvo su primer parto múltiple contribuyendo así a perpetuar su especie hoy en extinción.
Tristemente el más pequeño tuvo peor suerte y fue custodiado por un pequeño querubín hasta las puertas del cielo.


Lourdes Sánchez Jiménez
OTRA MAÑANA
Otra mañana más, se levantaba para ir a aquel deleznable trabajo, el brillo de los primeros rayos de sol entraban por la ventana, aunque en el aire aún perpetuaba el relente de la noche.
Bajó a la cocina dando los buenos días a su madre, que preparaba el desayuno. Mientras tomaba su taza de café con leche recordó cuando, siendo un querubín, su abuela le suadía que estudiase para que fuese dueño de su libertad y no tuviese que trabajar en el negocio familiar día tras día, desde el amanecer hasta el anochecer.
Se levantó de la mesa, besó a su madre deseándole un buen día, ella acarició su pelo apaciguándolo, diciéndole:
-Hijo, hasta que no encuentres otro trabajo, es lo que hay…
-Ya lo sé, mamá…, ¡pero es que odio ordeñar a esas malditas cabras!

lunes, 14 de junio de 2021

Rafa Núñez recita varios de sus poemas en la librería EL CALLEJÓN DEL CUENTO en Vélez-Málaga.

 


El viernes 11 de junio pudimos disfrutar de la maravillosa poesía de Antonio Serralvo dentro del ciclo "viernes de poesía" que durante el mes de junio se celebra en la librería EL CALLEJÓN DEL CUENTO en calle Arroyo Hondo nº 19 en la localidad de Vélez-Málaga.

Rafa Núñez ha asistido en varias ocasiones a estos encuentros poéticos y animado por el entorno y por el clima que allí se respiraba, el pasado viernes se animó a recitar algunos de sus poemas más carismáticos y personales de su primeriza antología poética "Amalgama de hojas secas", tras completarse la ronda de poetas programados en dicho evento.

Aun con los nervios a flor de piel se sintió muy orgulloso de compartir sus poemas con un público tan entregado. Rafa Núñez aprovechará la ocasión para asistir a nuevos encuentros poéticos con la intención de mostrar sus composiciones y de fomentar la poesía como instrumento de comunicación y transporte de cultura.


Recordemos que desde hace varias semanas la librería EL CALLEJÓN DEL CUENTO es punto de venta de la antología poética "Amalgama de hojas secas".

Cada paso es fruto de una carrera de fondo con numerosos obstáculos que hay que salvar para mostrar un trabajo que recopila los mejores poemas de toda una vida entregada a la escritura.

En el Club de Lectura y Teatro de La Viñuela seguiremos apoyando la cultura en todas sus vertientes y sumando tus pequeños éxitos que son también los nuestros.