Laura Pérez Alférez
AMIGA MÍA
Ayer mirándote a los ojosno supe que pensar,
si es amor lo que sientes
o es costumbre nada más.
Ya no me hablas como antes
ya no te siento entregada
ya no te alegran mis cantes
pero no te diré nada.
Tú me hablas yo sonrío
no sé qué puedo hacer
igual el fallo es mío
por intentar complacer.
Qué hago para olvidarte
cómo hacer para no pensarte
qué le digo a mi pobre corazón
que no sabe latir sin tu amor.
No me queda más
que el tiempo,
¿esperar....u olvidar?
me haré fuerte día a día
pero no te dejaré de amar.
Hoy de repente surgiste de la nada
afirmando un mañana de verdades
te quedaste entre mis soledades
ausente amiga mía.
A PESAR DE MÍ
y un universo de constelaciones
se dibuja en los pliegues de tu piel.
Mapa estelar anhelo de mi boca
lienzo humano moteado de misterio
deidad que me da forma y sentido.
Años luz me separan de tu inmensidad
y trazo nuevas líneas imaginarias
que me acerquen al corazón de tu galaxia.
Gravito por el firmamento encarnado
hasta que rozo la espiral de tu vientre
gusano que me engulle y me atrapa.
ETERNA POESÍA
Podrán los mares secarse,
desaparecer las arenas del tiempo,
y ahí seguirá latiendo
un grácil y emocionado verso,
pues los poemas son eternos,
no tanto así el amor,
pero nos quedan en el tintero
palabras a discreción.
Al valor de los valientes,
al honor de los caídos,
a la fe de esas gentes
que a un dios se han unido.
Podrán los ríos navegar,
serenos y alegres monte arriba,
y los rayos de la luna iluminar
la gruta más escondida.
Todo puede cambiar
su esencia y su fundamento
y aun así se escribirán
los más bellos versos
porque infinita es la poesía
e incontables sus universos.
Gema Frías Luque
NUESTRO MOMENTO DIARIO
Te sumerges en las aguas
deteniendo los relojes
que sin meta ni horizonte
en el tiempo se congelan.
Y ahora el río, arrepentido,
da la vuelta a sus acordes,
y los peces se sorprenden
y el aire está aturdido
pues no quieren que termine
el vital roce furtivo.
Me regala la brisa fresca
tu perfume a piel mojada
que se eleva en el arroyo
y en mis pupilas se clava
como recuerdos de un ayer
como promesas de un mañana.
Y en mi deleite puedo ver
que si no fueras tú te buscaría
pues no imagino la vida sin ti
y hasta el río se secaría.
Lourdes Sánchez Jiménez
MUSA
Musa, que despliegas tus alas,
dime dónde vas a volar,
quizás tus pétalos al viento me lo puedan contar.
Cuando expandes tus semillas
por el aire van,
llenando de vida la tierra,
aún sin arar.
El rocío y la lluvia tus compañeros serán,
dándoles de beber a tus hijos
que en el campo jugarán.
Dori Calderón Ramos
EL REGALO DE LA POESÍA
Mamá, no sé qué he leído,
pero no es un cuento.
Hija, no son historias todo lo escrito,
te aseguro que no miento.
Tampoco es una leyenda,
aunque eran palabras bellas.
Si sigues leyendo, tal vez te sorprenda,
Y verás que hay palabras que dejan huella.
Pero mamá, me ha sonado a música y alegría,
eran palabras con ritmo y armonía.
Hija, son palabras de poetas,
que con sus manos inquietas,
nos regalan la poesía.
Rafa Núñez Rodríguez
TIC TAC
La mecánica del corazón
se refleja en los charcos
que salpican risas infantiles,
en las nubes de algodón
que saboreamos con la mirada.
Colores rojizos pintan churretes en rostros ilusionados,
sueños que golpean corazones hambrientos,
labios mudos que sucumben ante ti.
La mecánica del corazón
habla mientras siembra enredaderas
con formas extrañas
de las que brotan palabras,
unas dulces y temblorosas,
otras eternas y calladas.
Hojas que se tiñen de deseos únicos,
de los que duelen en el estómago,
de los que no nos dejan respirar.
La mecánica del corazón
se alimenta de las lágrimas
envueltas en lazos de colores,
o de las que saben a decepción,
pero siempre habrá palabras
que le den cuerda a nuestro corazón,
y las escribiremos,
y las leeremos,
y nos abrazaremos a sus susurros.
La mecánica del corazón
se escribe con latidos,
de esos que palpitan,
de los que forman palabras
y lo convierten todo en poesía.
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